¿Qué Talento Atesora la Semilla que Cuidamos?

¿Qué Talento Atesora la Semilla que Cuidamos?

La semilla: cada una atesora un Talento diferente

Cada persona, cada ser es como una semilla.  Cada semilla es especial, pues atesora una planta diferente. Cada planta tiene unas características que la hacen fascinante, unas características que no son buenas ni malas, son su naturaleza. Una planta puede crecer y ser una trepadora, enredadera flexible de tronco versátil, adaptable al objeto o situación donde se encuentre. Capaz de elevarse del piso a unas alturas inimaginables para buscar la luz.  Otra semilla por el contrario puede atesorar una planta que crece para tornarse en un árbol de tronco fuerte, grande y alto, frondoso, que da sombra, abriga a otros. Otra puede ser la semilla de un arbusto pequeño pero fuerte, de ramas y hojas que lo hacen ser compacto y con la habilidad para crecer en los ambientes mas agrestes, sobre rocas, peñascos, en climas duros. 

Semilla de Arbusto, semilla de Cactus, de Girasol, semilla de Roble… cada semilla tan especial como la anterior. Todas diferentes, guardan un tesoro. 

Terrenos y ambientes diferentes para cada Semilla

No existen ambientes buenos ni malos, existen ambientes menos propicios o más propicios para que esa semillita prospere o para que cada planta se desarrolle.   

Cada planta tan especial y única requiere unas condiciones particulares para crecer.  ¿Qué pasaría si yo tomara la semilla del Cactus más hermoso del desierto y la ubico en la mitad de la selva?  La selva es para muchas semillas el mejor terreno, el más propicio…y ¿lo es para el Cactus?  Y si tomo la semilla de un Cedro y la ubico en un terreno desértico.  Seguramente ninguna de ellas germina, y si lo hace no crecerá tanto como su propia naturaleza se lo permite.   

Si brindamos a la semilla de un Cactus un ambiente y terreno propicio, así como a la semilla del Cedro, de la Campanilla, del Roble un ambiente ideal… Germinarán, Crecerán, se Desarrollarán y Brillarán en todo su esplendor.   

Unas semillas requieren de un gran espacio, de lo contrario se asfixian. Otras requieren de un terreno y espacio pequeño, ajustado, de una estructura para crecer con confianza y fuerza. Unas semillas requieren de mucha luz, de mucha iluminación y orientación.  Mientras que otras, solo con un pequeño rayo de luz tienen suficiente para crecer rápido, si les das demasiada luz se quedan pequeñas, se acomodan.  Unas semillas necesitan agua en abundancia. Otras muy poca agua.  A unas les gusta el viento, el frío y las condiciones de clima fuerte y variable, las necesita para fortalecerse y crecer firme. Otras semillas necesitan un ambiente cálido y estable, sin cambios climáticos.  No existen ambientes buenos ni malos, existen ambientes menos propicios o más propicios para que esa semillita prospere.

El reto como padres

Como padres debemos observar con detenimiento la semilla que Cuidamos, no la del vecino. Como padres debemos desarrollar la habilidad para silenciar todo el ruido externo  y realmente escuchar, observar y comprender que tipo de planta atesora la semilla que tenemos en nuestras manos.  Pues de esta claridad dependerá el que podamos identificar qué es lo que ella requiere, qué terreno o ambiente necesita para poder crecer en todo su esplendor y brillar desde su propia naturaleza o su Don.

Tantos Dones y Talentos como Semillas

A la semilla que cuidas la debes Observas como padre, la debes Escuchar como padre, la debes Sentir como padre y la debes Leer, hasta que Comprendes que Atesora.  Siempre atesora un Don o Talento. Cada Don es tan especial y hermoso como el otro y el otro y el otro. Todos igualmente especiales.

¿Qué podría atesora?

Atesora un Don de Artista; atesora un Don de Chef o de Comunicador; un Don de Músico, un Don de Constructor. Un Talento de Deportista o un Talento como Matemático. Un talento para Crear con las manos como Carpintero, Diseñador, Joyero. Un Don para transmitir, Re-crear, fascinar o Enseñar a través de la Escritura. O solo Enseñar. Un Don para Observar y Comprender las maravillas de lo minúsculo y de lo que no se ve de la Naturaleza, o para Comprender a los Animales y sus necesidades. Un talento para comprender y ser sensible a lo que es Justo y hacer valer los Derechos, hablar en nombre de lo Justo, enseñar sobre la Justicia.  Un Talento para Sanar a través de las manos, de la voz, de los consejos, de la escucha. Tiene un Talento para Empatizar, fácilmente meterse en los zapatos de otros y sensibilizarse.  Un Talento para Liderar, Liderar a un grupo, a una comunidad, ser la voz de otros. Un Talento para hacer reír, crear alegría donde hay tristeza…  Y sigue y sigue la lista de Dones y Talentos. Existen tantos Dones y Talentos como semillas.  

La semilla no la eliges tu como padre, ésta solo te llega a ti como un Regalo y una Sorpresa… pues ¿qué padre sabe exactamente que tipo de semilla será la que tendrá que Cuidar?   

Todas las semillas germinan en tiempos diferentes

La semilla del árbol mas grande, fuerte y majestuoso germina y crece mucho más despacio que la de una planta trepadora. Si comparamos la semilla que cuidamos con la del vecino resulta que nos podemos frustrar, desanimar, angustiar. Y guiados por estos sentimientos generar un ambiente no propicio, generar tensión, conflicto, poca credibilidad, estrés alrededor de la semilla, y esto sí puede afectarla para que encuentre su camino.  Cada personita, bajo las condiciones apropiadas debe encontrar su propio camino, es decir Cada semilla germina a su propio tiempo.  Unas muy temprano y otras más tarde, ayúdale como padre a encontrar lo que atesora.

Nuestra Misión

Leer, comprender y amar el Don o talento que atesora nuestro hijo. Brindar el ambiente propicio para su germinación, es decir, crecimiento y desarrollo.   ¿Que más? No se puede mucho más…  Debes dejarlo ser a su momento, el mismo elige su tiempo.

Nada es fatal. Nos equivocamos, luego lo modificamos…

Cuando a una semilla le brindamos el ambiente no propicio (una semilla de cactus en la mitad de una selva), podemos tomar esa pequeña planta confundida, desubicada y brindarle lo que requiere… ¡responderá de forma sorprendente al cambio!  Todos los seres humanos respondemos a los cambios, esta es una habilidad innata con la que nacemos. Cambiamos, respondemos, modificamos, mejoramos, Aprendemos. Le podemos dar a ésta lo que no le dimos ayer y ella responde hoy favorablemente.

Las necesidades básicas, las que siempre se requieren

Como las plantas, existen unas necesidades básicas. No importa el tipo de semilla o de planta que germinará. No importa cual es el Don o el Talento que atesora. No importa si germina rápido o despacio… siempre requiere “Amor” como Agua. Siempre requiere “Vínculo” como Aire.  Requiere la “Credibilidad” como la luz del sol. Las demás son variables que según la semilla se pueden o no dar.    

 

Si tienes un interés en recibir un apoyo o una orientación, pregunta por nuestro Servicio de Psicología (Programa Afectivo-Emocional y Motivacional)